Ciclo de vida de los Ideales

A través de la Historia de la Humanidad han ido apareciendo diversos personajes que han sido capaces de ver las cosas que están mal. Han ido hilvanando conceptos de acuerdo a ideas y sentimientos. Y luego han tratado de desentrañar la manera de llevarlos a la práctica a fin de revertir ese estado de cosas.
Cómo? Comunicando esas ideas a otras personas. Compartiendo sus sentimientos, su pasión. Muchas veces intentando inflamar los espíritus.
Cuando se llega a una masa crítica, se busca pasar a la acción, y ahí es cuando empieza a manejarse la palabra


En ocasiones, esas ideas calan profundamente en los receptores, y se convierten en fuertes convicciones. Y esas convicciones pueden llegar a ser tan fuertes que importan más que la vida misma. Las personas están dispuestas a sacrificarlo todo por sus ideales.
En ese momento, cuando hay un ideal compartido por una masa crítica de personas afines y dispuestas a sacrificarlo todo en pos de él, es que se grita


A veces las revoluciones son ahogadas en la sangre de los revolucionarios. Otras, los revolucionarios llegan a obtener aquello por lo que luchan (a veces obtienen aquello por lo que nunca lucharon, pero ese es otro tema). Sea como sea, los ideales siguen vivos en la mente del imaginario colectivo.

Sin embargo, con el correr del tiempo se van diluyendo los conceptos.
Con el paso de las generaciones las ideas pierden vigor y se convierten en retórica barata.
Finalmente, llega un momento en que esa palabra que antaño enmarcaba nobles ideales es usada para cualquier cosa, y entonces su significado se desvanece, como cuando uno repite muchas veces la misma palabra.
El resultado es este