Ráfagas de humanidad
"Dame un minuto para pensar; es que me divierte. Pensar, cada tanto, no está mal."
Un empleado público durante una conversación inenarrable.
—Tenés alambre de acero?
—Nooo... del de acero no vendemos más. Te pinchás toditos los dedos al cortarlo, viteh?
Un lúcido vendedor de un lugar que, justamente, se dedica a vender cables de acero.
Nadie le habló de las bondades de los guantes de cuero.
Nadie le habló de las bondades de los guantes de cuero.
"En las emergencias hay que ir contra mano por la calle; así vos ves a los que vienen, y los que vienen te ven y te pueden esquivar"
L, durante una instructiva charla sobre educación vial.
—Hace frío afuera?
—Claro que hace frío! Estamos en pleno julio y son las 7 de la mañana!
—Preguntaba, porque ayer había -1ºC... y la radio acaba de informar que ahora estamos a 9ºC. Esos son 10º más... a lo mejor se notaba la diferencia.
Mamá.
2 comentarios:
Juas, son muy surrealistas las anécdotas. Material jugoso para el humor gráfico.
Me pregunto qué vendían entonces donde supuestamente se dedicaban a vender cables de acero.
Sí, hay algunas que no tienen desperdicio... y lo mejor de todo es que no son ficción.
Vendían cables... el "alambre" es ese tipo finito, de varios hilos más finitos, como agujas. En realidad, no tengo ni idea!
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