La locura nuestra de cada día
Momentos después de interiorizarme de la historia amorosa de "C", sigue un silencio (que agradezco). De repente "C" empieza a reír y a gritar como un poseso mientras maneja el camión.
Lo miro, sonrío (no me asusta porque cada tanto hago lo mismo), e irónicamente le comento cuánto me alegro de que esté mejorando.
—Ah, sí! —Me contesta con tono de autosuficiente satisfacción—. Desde que el médico me dio en la tecla y me dijo lo que tengo, estoy mucho mejor!
—Bueno, me quedo mucho más tranquilo!
—A que sí? —Responde con una amplia sonrisa...
3 comentarios:
Qué es lo que despierta tu curiosidad, Pequeña Saltamontes?
saber por qué está más tranquilo!!
Jaja! Bien, es una duda razonable.
Es nada más que una figura irónica...
Publicar un comentario